El pasado martes nuestro
Cuartelillo lució con pinceladas de vivos colores. Los farolillos se adueñaron
de sus techos para ambientar, junto a las sevillanas y las rumbas, la IV Cruz
de Mayo.
Organizada por los jóvenes de
nuestra Hermandad, esta fiesta, iniciada en 2009, pretende recuperar en nuestro
pueblo una tradición prácticamente en el olvido.
Comidas y postres caseros
elaborados con dedicación por colaboradores de nuestra Hermandad, sirvieron de
tapas y platos para los presentes, que pudieron disfrutar de esta fiesta desde
la una de la tarde y hasta la media noche.
Como es típico en esta fiesta,
una Cruz presidió la entrada de nuestra Capilla. En esta ocasión los colores
azul y blanco, que representan el LXXV Aniversario de Ntra. Sra. de los Dolores,
envolvieron la Cruz y el estandarte de Nuestra Madre.
Limones y naranjas daban
un toque de frescura que nos recordaba que, a pesar del “mal tiempo”, nos
encontramos en primavera. Lebrillos, tinajas, búcaros y macetas… lecheras y
jarrillos… y otros aperos de hojalata… sirvieron para engalanar la Cruz,
haciendo viajar por sus recuerdos a los más mayores y acercando a los más
jóvenes a tradiciones y costumbres de años pasados.
Desde estas líneas la Juventud
organizadora de este evento quiere agradecer a todos los asistentes su
colaboración, y a la vez, invita y anima a todos los que lo deseen a unirse a
nosotros en todas y cada una de las actividades que llevamos a cabo en nombre
de Nuestras amantísimas Imágenes Titulares.
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